Saludar de beso o mano, ¿qué está haciendo todo el mundo?

Saludar de beso o mano, sobre todo en un país como México, ¿sigue siendo una buena opción ahora que el Covid-19 se ha esparcido por todo el mundo? Cuando el presidente francés, Emmanuel Macron, se acercó a saludar de beso en la mejilla al primer ministro italiano Giuseppe Conte, no una sino en dos ocasiones durante una cumbre en Nápoles esta semana, fue mucho más que un saludo. Fue una señal para que los ciudadanos no teman a sus vecinos mientras se propaga el coronavirus proveniente de China y el cual llegó a Europa vía Italia. Los besos amistosos en la época del coronavirus se han convertido en un nuevo dilema y quizás se tengan que cambiar las costumbres. Pero incluso los norteños más reservados están lidiando con renunciar al sagrado apretón de manos. El comisionado especial de Italia para el coronavirus, Angelo Borrelli, sugirió que la efusividad de los italianos podría estar contribuyendo a la propagación del virus, con más de mil 500 personas que dieron positivo y 34 muertes, casi todas en el norte del país. Pero no ha habido edictos oficiales sobre la costumbre social de los besos, que según los sociólogos está enraizada en la cultura mediterránea italiana, así como en su sólida estructura familiar y social. Tenemos una vida social colectiva que es muy florida, muy expansiva. Tenemos mucho contacto, nos damos la mano, nos besamos, nos abrazamos”, dijo Borelli a los periodistas. Tal vez es mejor en este periodo no darse la mano, y no tener demasiado contacto, y tratar de ser un poco menos expansivo, que es diferente de cómo soy”. El ministro francés de Salud, Olivier Veran, recomendó el sábado a las personas que reduzcan la “bise”, la costumbre en este país y en otras partes de Europa saludar con besos en las mejillas, además de estrechar la mano. Francia, que ha tenido 100 casos y dos muertes hasta el momento, hizo una recomendación similar durante la epidemia de gripe porcina hace una década. En España, donde los besos en las mejillas también están muy arraigados, hasta ahora continúa la práctica sin cesar. Aquí se han reportado 71 infecciones por coronavirus. En Alemania -con 66 casos de Covid-19- donde se enseña a los niños a estrechar la mano con fuerza para demostrar la personalidad, los expertos en salud están aconsejando dejar la etiqueta tradicional.